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«Yo tenía una granja en África» No se me ocurre mejor manera de empezar este post.

Como una auténtica Mary Kingsley pero sin las enaguas y sin la sombrilla, como una  aventurera del siglo XIX, aprovechamos nuestra estancia en la Granja Torburnlea para hacer las fotos de este look safari. Un look safari realista y con estilo.

Resulta curioso que nos alojáramos en Nelspruit porque no es un sitio turístico, pero tras 24 horas de viaje buscamos un alojamiento entre Johannesburgo (Joburg) y Kruger que nos permitiera descansar en nuestra primera noche sudafricana. Y no sabéis qué acierto. 

TorBurnLea es una antigua granja situada a las afueras de Nelspruit, construida en 1923 por colonos ingleses y ahora restaurada por el tataranieto de estos siguiendo los planos originales. Está repleta de antigüedades y detalles, cada rincón es una delicia para los sentidos, cada terraza, salón, esto es lo que yo llamo la importancia de los pequeños detalles. 

Pero la inspiración de hoy viene de la mano de una gran mujer, una de aquellas exploradoras del S. XIX que fueron tomadas por locas o dementes. Y esta es, Mary Kingsley.

Mary Kingsley consiguió que la tribu de los Fang (tribu canibal) la acogiera, a pesar de que cada vez que caía enferma le preguntaban si moriría esa noche con la intención de hacer una «rica cena».

Mary Kingsley era brava y valiente y aunque viajaba con sus vestidos, sombrillas y demás parafernalia se adaptó mejor que muchos de los más aclamados exploradores. Gracias a sus enaguas se salvó de morir en una  intrincada trampa con estacas de madera.

Realizó un trabajo botánico importantísimo para la National Geographic. Otros exploradores quedaban asombrados antes sus historias porque además Mary Kingsley tenía un gran sentido del humor. «Pronto surgió una especia de amistad entre los Fang y yo. Tanto ellos como yo reconocíamos que pertenecíamos al grupo de humanos con los que es mejor beber que luchar»

Defendió que la raza negra no era inferior a la blanca e incluso disgustó a la Iglesia de Inglaterra cuando criticó a los misioneros por su empeño en cambiar a los africanos.

Me hubiera encantado conocerla. Y a quién no.  

Ahí va mi homenaje a una de mis heroínas favoritas, mujer fuerte, valiente y con humor, porque sin humor no hay aventura que valga.

Espero que os guste. 

Gracias por visitar este blog de moda y viajes. 

«I had a farm in Africa» ​​I can not think of a better way to start this post.

As an authentic Mary Kingsley but without the petticoats and the umbrella, as a nineteenth-century adventurer, we took advantage of our stay at the Torburnlea Farm to take photos of this safari look. A realistic look to go on safari but stylish.

It is curious that we stayed in Nelspruit because it is not a tourist site, but after 24 hours of travel we looked for accommodation between Johannesburg (Joburg) and Kruger that would allow us to rest on our first South African night. And what  a great idea.

TorBurnLea is an old farm located on the outskirts of Nelspruit, built in 1923 by English settlers and now restored by their great-grandson following the original plans. It is full of antiques and details, every corner is a delight for the senses, every baranda, lounge, this is what I call the importance of small details. 

But today’s inspiration comes from the hand of a great woman, one of those nineteenth-century explorers who were taken by mad or demented. And this is her, Mary Kingsley.

Mary Kingsley got the tribe of the Fang (cannibal tribe) to welcome her, even though every time she fell ill they asked her if she would die that night with the intention of making a «especial dinner».

Mary Kingsley was brave and hard and although she traveled with her dresses, parasols and other paraphernalia she adapted better than many of the most acclaimed explorers. Thanks to her petticoat, she was saved from dying in an intricate trap with wooden stakes.

She made a very important botanical work for National Geographic. Other explorers were amazed before their stories because Mary Kingsley also had a great sense of humor. «Soon there was a kind of friendship between the Fang and I. Both, them and I recognized that we belonged to the group of humans with whom it is better to drink than to fight.»

She also defended that black race was not inferior to white and even displeased the Church of England when she criticized the missionaries for their commitment to change the Africans.

 I would have loved to meet her. And who doesn’t.

Here is my tribute to one of my favorite heroines, strong woman, brave and with humor, because without humor there is no adventure.

Enjoy it.

Thanx for visiting this Fashion & Travel Blog.

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Pics @grk76

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